jueves, 13 de diciembre de 2012

Títulos y más títulos...

En la anterior entrada, estaba hablando sobre la importancia que tiene estudiar en la actualidad. Desde que yo era pequeño, ya en el colegio y en casa se me decía que si no me aplicaba no sería nadie en la vida. Además, como ya hemos visto, la enseñanza de hoy se basa (por desgracia) en darle al alumno una serie de contenidos predeterminados (demasiados) para que los aprenda de memoria y luego los "vomite" en el examen. De esta manera, aquellos niños que no tienen ningún tipo de trastorno perceptivo o cognitivo y encima les gusta portarse bien (por decirlo de alguna manera) y cumplir con sus obligaciones, se ven rodeados por un montón de deberes que deben llevar día a día. Sin embargo, el resto, aquellos que no sigan las instrucciones del maestro, que no estudien el temario, o que se dediquen a invertir el tiempo en otras cosas tendrán un futuro más crudo.

El paso del tiempo va situando a todos esos niños en determinadas salidas profesionales, algunos se ponen a trabajar en lo primero que encuentran una semana después de acabar la ESO, otros deciden hacer un grado superior, otros se presentan a selectividad para acceder a la Universidad y hacer una carrera.

En mi caso, yo pertenezco a este último grupo, quizás a los que más se nos haya exigido hasta llegar donde hemos llegado. Me refiero a la "cantidad" de estudio. Muchos temas, muchas asignaturas (algunas innecesarias para mi futuro), muchas horas frente al escritorio, muchas horas de insomnio, muchos exámenes en muy poco tiempo, y mucho dolor de cabeza... Todo resumido al final del año en una sola nota, la que determinará tu futuro. Realmente, es mucho trabajo, y encima te quedan los cuatro años de carrera después de eso. Es gracioso cuando me pongo a pensar en todo lo que he aprendido en tantos años en el colegio...muy poco!

Para colmo, la situación actual no es fácil. Estamos en crisis, miles de personas en paro, y miles de nuevos estudiantes buscando un hueco donde ganarse la vida. Entonces la competitividad aumenta de forma exagerada. No vale con estudiar, tienes que estudiar más, hasta que revientes. Hasta que sepas más que todos los demás y entonces puedas encontrar un trabajo más fácilmente. Yo siempre he sido una de esas personas que se preocupan demasiado por lo que les rodea, obligaciones, responsabilidades, etc. Pero ya estoy un poco harto de hacer las cosas así, siempre con líos en la cabeza, pendiente de muchas tareas (tantas que a veces no sabes ya cuáles son las más importantes), de lo que tienes que hacer mañana, la semana y el mes que viene; y sobre todo, sin levantar la mirada de el reloj, como un esclavo del tiempo. He llegado a la conclusión de que es mucho más valioso vivir el día a día, centrándote cada segundo en lo que tengas delante, disfrutando el presente y sin preocuparte por el mañana. Cada uno verá lo que hace.

Pero bueno, volviendo a lo de antes, aunque vivas más tranquilo o más nervioso, que no se te olvide estudiar. Aunque, ¿qué significa hoy en día tener una carrera? Nada. Aún necesitas tener más. Tienes que rellenar el currículum con todo lo que se te ocurra. Sácate cursillos de lo que sea. En el campo de la actividad física y el deporte la verdad es que pueden haber muchas salidas, de lo que me alegro bastante. Con la carrera puedes especializarte en diversas opciones: gestión, docencia, salud, alto rendimiento, recreación... Y además, si encima tienes títulos extras mejor que mejor: monitor de natación, de fútbol, de tenis, de baloncesto, de rugby, de fitness acuático, entrenador personal, etc. 

Qué maravilla! Cuánta facilidad, puedes ser hasta una persona multifunciones que sabe de todo. Pero cómo accedes a eso? A base de dinero y más dinero. Muchas veces incluso resulta increíble, puedes sacarte el título de tal cosa invirtiendo una pasta pero tan solo  unas cuantas horas de tu vida. Es un poco extraño. Hay muchas ofertas, puedes optar a cursos de lo que quieras y sacártelos en un plis plas. Pero siempre PAGANDO. Entonces, ¿toda esa gente que aprende tanto en tan poco tiempo está bien preparada para ejercer en tal actividad? ¿O simplemente puede permitirse el lujo de decir "mira todo lo que tengo" y luego no tener ni idea de nada? ¿Y aquellos otros que no pueden pagarse tantos títulos? ¿Ya no podrán ser igual que el resto, sólo porque no tengan un certificado oficial firmado por la real fundación de no sé qué? Pues qué lástima. Y encima, luego te sacas el título de lo que sea y resulta que vas a trabajar a un sitio y te dicen que eso no te acredita como tal, que tenías que habértelo sacado por la federación o leches. ¿Y tú qué ibas a saber si en ese sitio te han engañado o no, y si hay varias empresas que lo ofrecen y algunas son "oficiales" y otras no?

En definitiva, de todo se hace negocio. Estamos en una sociedad materialista en la que si pagas, tendrás títulos y serás alguien. Y así funciona todo. Saturación, competitividad y mucho espabilado. O te mueves o te quedarás atrás...

4 comentarios:

  1. No es cierto que haysa aprendido poco. En las aproximadamente 6000 horas que pasa un niño escolarizado aprendide mucho, pero muy poco de lo que aprende tiene que ver con lo que le enseñan. Es la imagen del iceberg, del currículum oculto. Y si no, piensa: ¿SAbes hacer una raíz cuadrada? Segurametne no ¿Sabes que hay que callar al empezar de clase? Seguramente sí. ¿Cuál de las dos cosas te han enseñado? ¿Cuál has aprendido?

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    1. Claro, hemos aprendido mucho, pero en relación con todo lo que se nos enseña es muy poco. Al fin y al cabo, los contenidos de cada asignatura acaban perdiéndose, y lo que sí que aprendemos es a reflexionar sobre otras cosas que estás detrás de todo lo escrito, el currículum oculto como tú dices. El callarme cuando comienza la clase es algo que no pone en los libros, pero que yo he vivido durante tantos años y al final, acabo comprendiendo porqué lo hago.

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  2. Me encanta esta entrada porque Toni plasma por escrito unos pensamientos que nos rondan por la cabeza a más de uno y él ha sabido sintetizarlo y decirlo todo bien clarito.
    Me ha llamado la atención una de las frases finales: si pagas tendrás títulos y serás alguien...hemos llegado a un punto en el que, por desgracia todo es negocio. Ojalá la sociedad tuviera por ahí un botón que pusiera RESET o reiniciar...

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  3. Me alegro, espero que al igual que tú y yo, mucha gente piense igual. Son cosas que saltan a la vista, y a mí me gusta sacarlas a la luz de vez en cuando.

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